domingo, 19 de junio de 2011

¡Llegó la exposición!

Hoy ya nos tocó exponer nuestro trabajo sobre intervención educativo con las personas sin hogar. La verdad es que salvo algunos fallos técnicos del directo, fue bastante bien. Cada una explicó varios puntos del trabajo y creo que conseguimos trasladar a nuestros compañeros el trabajo realizado con más o menos claridad.

Aunque al final el tiempo nos vino justito creo que todas disfrutamos de poder exponer, después de tanto esfuerzo, nuestro trabajo.



Mi experiencia personal con la realización del mismo ha sido bastante positiva. A pesar de que en ocasiones hemos estado un poco más perdidas y agobiadas, creo que hemos llegado a la exposición con los deberes hechos. Además de que durante toda la carrera hemos tenido que hacer muchos trabajos en grupo, hay algunos que por la cantidad de tiempo y dedicación los recordaremos como realmente importante y sobre todo por la cantidad de situaciones que vives con las personas con quien los haces.

En cuanto al propio trabajo en sí, me alegro de haber escogido la temática de personas sin hogar, ya que quizás es uno de los colectivos que menos hemos estudiado antes. Pero desarrollando todo el tema nos hemos dado cuenta de lo abandonado que está este colectivo.

Probablemente las personas sin hogar sea el colectivo que se encuentra en situación de mayor marginalidad y sin embargo a la vez sea el que estemos más acostumbrados a ver. En mi opinión, quizá ese sea uno de los grandes problemas de este colectivo, que nos hemos acostumbrado a que en nuestro paisaje urbano diario haya personas sin hogar, y por no darnos cuenta casi no creemos que sea un problema. Más bien el problema no es suyo, es nuestro, pero son ellos quienes lo sufren.

También me gustaría destacar que la mayor parte de la intervención que se realiza con este colectivo es de carácter asistencial. A pesar de que es fundamental responder a las necesidades de básicas de las personas para poder trabajar cualquier otro aspecto este trabajo también ha cambiado mi perspectiva. En el caso de las personas sin hogar que se encuentran en una situación de exclusión social muy grave y muy cronificada la mejor forma de intervenir es de forma integral. De esta forma se puede pensar en la reinserción social de estas personas ya que a través de los recursos asistenciales solo se palia en cierta medida una situación de exclusión social.

31/5/2011

Hoy es el día previo a la exposición y tenemos que dejar todas las cosas cerradas y atadas para que todo salga bien. Como ya teníamos pensadas las dinámicas y la lista de materiales que nos hacía falta hemos dedicado la mañana a organizar los recursos que íbamos a utilizar para la exposición y las dinámicas.

También terminamos el powerpoint de la exposición y la verdad que me resultó bastante entretenido. Normalmente no me entiendo demasiado bien con las nuevas tecnologías, pero quería aprender a hacer una presentación que fuese vistosa y clara. Probando botones y teclas, al final conseguimos un resultado que valoro bastante positivo.

Como éramos el último grupo que exponía teníamos la dificultad de la escasez de recursos y dinámicas que resultasen entretenías y seguir manteniendo el interés por el tema. Motivadas también por las ganas de poner un toque de humor a una realidad tan difícil como la que estábamos trabajando se nos ocurrió cerrar la exposición con un programa de televisión.

…y así se creó Consigue Que Cambie! Nuestro pequeño noticiero en el que preguntar a la gente de la calle que es lo que pensaba sobre las personas sin hogar y trasmitir algunas noticias llamativas que habíamos encontrado relacionadas con el tema.

Una vez que hicimos el guión de nuestro programa y nos caracterizamos nos fuimos a la calle y empezamos a rodar con nuestro super-equipo compuesto por una cámara de fotos, un micrófono sin enchufar, nuestras chaquetas, camisas, corbatas, gafas de sol y mucho desparpajo. Sin embargo no fui fácil encontrar a mucha gente que quisiese participar. El principal problema era que le grabásemos, pero al final conseguimos nuestras entrevistas.

Después empezamos a grabar el programa dedicado a las noticias. Después de reírnos mucho y desesperarnos un poco, conseguimos que todo quedase más o menos bien grabado. Pero aún quedaba el montaje técnico. Con un poquito de ayuda y un rato largo, nuestro video estaba terminado. Hicimos reparto de las partes de la exposición y organizamos las cosillas que quedaban por cerrar.

18-25/5/2011.Entorno carcelario

Este tema se ha desarrollado a través de so exposiciones en la que en una nos presentaron la situación general del sistema penitenciario y la intervención del educador social en el mismo, mientras que la segunda se centró en la atención a las drogodependencias en prisión.

Para poder acercarnos al tema es necesario partir de la función que desarrolla la cárcel. De forma general podemos decir que la presión desarrolla las funciones coercitiva, punitiva y reeducación es decir, disuadir a la población para la comisión de delitos, castigar los que los cometan y reeducar a estos para su futura reintegración social. Actualmente según lo establecido por el artículo 25.2 de la Constitución Española “las penas privativas de libertad y las medidas de seguridad estarán orientadas hacia la reeducación y reinserción social y no podrán consistir en trabajos forzados”. Sin embargo, la realidad de las cárceles es bien distinta ya que nos encontramos con que el 50% de la población reclusa es reincidente, por lo que su función educadora no se efectúa.

Además nos encontramos con una gran masificación, en la que la mayor parte ingresan por temas relacionados con las drogas (80%), pero también problemáticas relacionadas con la inmigración y enfermedad mental. A pesar de ello, destaca la escasez de profesionales que intervengan con este colectivo.

Ante la reclusión de una persona en un centro penitenciario, se producen una serie de consecuencias psicosociales entre las que podemos destacar la normalización e internalización del entorno carcelario, desarrollo de otras conductas desadaptadas y ruptura de las relacionas sociales y familiares. También se producen consecuencias directas sobre la propia salud de la persona ya que se pueden ver afectados aspectos como el autocontrol, la responsabilización o desarrollar ansiedad, que en muchas ocasiones, conduce al consumo de droga.

En la intervención con este colectivo encontramos a Trabajadores Sociales, psicólogos y educadores sociales. Entre las funciones asociadas a éste último encontramos:

  • Expedientes personales de las internos
  • Trabajo de grupos a través de talleres educativos sobre habilidades sociales, hábitos de higiene, etc
  • Socialización terciaria de los reclusos.

Una vez que la persona se encuentra en régimen abierto o en un proceso de reinserción social puede acceder a los Centro de Inserción Social. Con este recurso se pretende facilitar la reinserción social y familiar de los internos. Para ello se llevan programas de educación para la salud, hábitos alimenticios, educación para padres, etc.

Dentro de sistema penitenciario no todas las personas se encuentran en la misma situación. Dependiendo del grado en el que se encuentren, podrán acceder a algunos módulos u otros. Un ejemplo de intervención educativa en este ámbito son los Módulos de Respeto. Se trata de una iniciativa que pretende mejorar la convivencia, las relaciones sociales y la socialización terciaria con este colectivo. En este modulo, una vez que el preso lo solicita y es admitido en, se compromete a seguir una serie de normas como la no violencia, la prohibición de poseer o consumir drogas, así como colaborar de forma activa en las tareas de limpieza y funcionamiento del centro. Ellos deben organizarse y seguir un programa de actividades, funcionales, formativas y de ocio, diarias. Todos los internos tienen asignado un Programa Individualizado de Tratamiento (PIT).

Los internos se organizan en grupos de trabajo y cuando se incumplen las normas se les asigna un ”negativo” ya la vez que se refuerzan las conductas positivas. La conducta del interno tiene una repercusión directa en el grupo por que los trabajos semanales se asignan en función de la evaluación del resto de compañeros.

Se trata de un programa de habilidades y valores positivos que obliga a los internos a ponerlo en práctica, ya que pueden ser expulsados del módulo. Además, la normativa que rige estos espacios juega un papel determinante ya que favorece la creación y consolidación de hábitos y actitudes socialmente admitidos y se aleja de la subcultura carcelaria.

Este tipo de iniciativas sería bueno que se extendiese a todo el sistema penitenciario, ya que sólo permite crear otros espacios en los que los presos puedan desarrollar sus capacidades y habilidades de alguna forma y realmente pueda tener una incidencia educativa su paso por prisión. Sin embargo, este tipo de módulos no son los más numerosos y no todos los que lo solicitan pueden acceder. Generalmente, tienen que encontrarse en 2ºgrado y quedarle poco tiempo de condena, además de comprometerse con las normas estrictas que se establecen en estos módulos.

Como hemos dicho anteriormente, una de las principales problemáticas del entorno carcelaria es tanto el consumo como el tráfico de drogas. En muchas ocasiones existen problemas de drogadicción antes de entrar en prisión, pero también son muchos los que consumen una vez que están dentro como mecanismo de evasión de la realidad. Además, la venta de droga se asocia con cierto poder en la cultura carcelaria, lo que hace que los que venden y los que consumen, tengas estatus diferenciales y en ocasiones se produzcan conflictos (deudas, ajustes de cuentas, coodependencia).

En el caso de las drogas, también encontramos un recurso específico dentro del ámbito carcelario, los Módulos de Terapéuticos. En este caso, se trata de módulo que pretende desvincular a las personas del consumo de drogas y provocar cambios en los hábitos y aptitudes de los internos para que puedan desarrollar otros recursos terapéuticos. Dentro de esta modalidad encontramos dos tipologías

  • Unidad Terapéutica y Educativa en el que, dentro de presión se desarrollan grupos terapéuticos de internos que trabajan todas las áreas a través de psicólogos, educadores, trabajadores sociales, maestros, monitores y sanitarios.
  • Comunidad Terapéutica, se configura como un programa que acoge a internos drogodependientes en centros especiales en los que se desarrolla un tratamiento integral sobre las drogadicciones a través de actividades psicológicas, sanitarias, educativas, de tiempo libre y de incorporación social.

Un ejemplo de este tipo de recursos es la Comunidad Terapéutica de FADAIS, concretamente, el de Almonte. En el caso de este centro desarrolla tanto, rehabilitación de carácter residencial que ofrece asistencia orientada a la desintoxicación, deshabituación de la conducta adictiva, a la rehabilitación de hábito de comportamiento y al seguimiento de patologías orgánicas asociadas. En las Comunidades Terapéuticas se realizan tratamientos libres de drogas, con sustitutivos - Programa de Tratamiento con Metadona- (PTM), así como actividades socioeducativas orientadas a la Incorporación Social. Este recurso está destinado, tanto a la población en general que sufra adicciones como a aquellas personas del entorno carcelario que puedan y quieran solicitar someterse al tratamiento, ya sea como sustitutivo de la pena de cárcel o para terminar de cumplir la condena. En este sentido me gustaría destacar que este creo que es muy positivo que en este centro puedan confuir tanto personas que proceden del entorno y otras que no, lo que ofrecer un contexto más abierto para todos.

En mi opinión este tema ha sido muy interesante, ya que el colectivo de reclusos no lo hemos trabajado nunca. A pesar de que sí que conocíamos un poquito del funcionamiento gracias a un profesor del año pasado. En esa ocasión pudimos comprobar que el educador social aunque estaba presente como figura reconocida, en la realidad no pueda abarcar la cantidad de trabajo por la masificación de las cárceles. Aun así, y dado que la función de la cárcel es la reeducación y la inserción social, debería aumentarse esta figura profesional dentro del ámbito de prisiones.

Nota al margen

Tras realizar tantas entradas sobre los colectivos que encuentran en situaciones de desadaptación social y sería importante realizar una intervención educativa, no he podido evitar señalar que el educador social no se encuentra definido claramente en dicha intervención.

En muchas ocasiones (generalmente asociado a su corta andadura reconocida) la Educación Social no se encuentra de forma explícita en la intervención ante problemas de desadaptación y exclusión social. De hecho, parece que en ocasiones tiene que “competir” con otros perfiles profesionales que reconocen como propia una determinada “parcela” de intervención.

A pesar de que somos conscientes (y más después de tres años estudiando Trabajo Social y Educación Social) que no siempre es fácil determinar cuáles son las funciones y competencias de cada profesional. Sin embargo, eso no quiere decir que la presencia del educador social sea innecesaria.

En mi opinión, la Educación Social, como otras disciplinas sociales, pretende mejorar el bienestar de las personas y producir cambios en aquellas situaciones que alteren este bienestar. Pero da un paso más allá, intenta capacitar a las personas para que sean ellas las protagonistas del cambio y no hay una vía mejor que la Educación Social, para que este cambio sea personal, efectivo y con perspectivas de futuro.

11/5/2011. Intervención en adicciones: alcoholismo

El último seminario del curso se ha dedicado a la intervención ante las adicciones. Para ello ha acudido una trabajadora social de la asociación Anclaje, que se centra en la prevención del consumo abusivo del alcohol y en la reinserción de las personas con adicción al mismo.

Para contextualizar de forma general el tema, vamos a hacer un breve recorrido por la legislación relacionada. En 1985 se desarrolla el I Plan Andaluz sobre Drogas y en el se plantean, tanto las líneas de intervención generales centradas en la prevención, la atención y la incorporación social así como la creación de los centros provinciales de drogodependencias que se constituyen como los primeros centros de tratamiento ambulatorio.

Dos años después, se crea la Unidad de Desintoxicación hospitalaria y el Programa de Apoyo en las cárceles. Con la Ley 4/97 de Prevención y asistencia en materia de drogas s establece un marco normativo de atención e incorpora nuevos elementos como las drogas en el ámbito laboral o el juego patológico. Sin embargo, una de sus aportaciones más importantes es la de incluir el tabaco y el alcohol como drogas institucionalizadas.

Finalmente se desarrolla el II Plan Andaluz sobre drogas y adicciones que regula las áreas de actuación, los recursos destinados a este ámbito y los programas que se ponen en funcionamiento.


Una vez expuesto el marco legal, vamos a centrarnos en el tema del consumo de alcohol de forma más concreta. En primer lugar hay que tener en cuenta que el alcohol es una droga socialmente adaptada y presente en casi todos los ámbitos de interrelación y está muy arraigada entre nuestros patrones de comportamiento. De esta forma, la persona adicta al alcohol, se considera que tiene una enfermedad crónica, ya que provoca su deterioro en todas las áreas del individuo y no existe curación, sino recuperación. Además el alcohol produce la alteración del funcionamiento de los circuitos cerebrales que intervienen en el auto control, lo que a su vez puede provocar problemas psiquiátricos y adictivos.

Con todas las drogas en general, pero especialmente con el alcohol al que estamos socialmente más acostumbrados, es importante distinguir entre el uso, que no conlleva consecuencias negativas, el abuso, que comienza a dañar la salud física y el bienestar de un individuo y su entorno; y la dependencia, en la que existe una incapacidad de controlar la ingesta de la sustancia.

Dentro de la dependencia encontramos tanto la física que se manifiesta a través de la tolerancia y el síndrome de abstinencia; como la dependencia psicológica, relacionada con el incapacidad de control sobre la ingesta de la sustancia o su repercusión en las relaciones sociales entre otras.

En el caso de Anclaje, encontramos que funciona como centro de Tratamiento Ambulatorio. Dependiente de la Consejería de Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, desarrollando la función de puerta de entrada para el acceso a los dispositivos de apoyo a la drogodependencia.

Su trabajo se desarrolla en relación a dos programas:

  1. Programa de tratamiento de deshabituación para personas con dependencia al alcohol. Pretende dar a conocer el programa a la población general, así como extinguir conductas dependientes y la inserción o incorporación social de la persona. Para conseguir estos objetivos desarrollan las siguientes fases

  2. Programa de asociativas y complementarias al tratamiento de deshabituación. Tiene como finalidad dar a conocer la problemática del alcohol, concretar actividades que propicien el encuentro entre socios y familiares para intercambiar experiencias, concienciarse sobre su realidad y apertura de alternativas ante el consumo de alcohol.

Por último, una vez explicado la labor general de intervención que se desarrolla en Anclaje, vamos a trasladar las funciones del trabajador/a social.

  • Atención terapeútica
  • Relaciones institucionales
  • Ejecución y seguimientos del programa
  • Búsqueda de recursos
  • Elaboración de proyectos
  • Mejorar la dinámica asociativa
  • Dar a conocer la problemática a la comunidad

Este seminario ha sido bastante interesante, ya que durante todo el curso, hemos trabajado el tema de menores, en la que la mayoría de recursos eran públicos. En este caso, hemos abordado un centro privado, pero concertado con la Junta y además tiene una función principal en el acceso a los recursos y servicios dedicados al colectivo de adicciones al alcohol.

A pesar de que el tema de las adicciones lo hemos trabajado desde el principio de la carrera, por lo que más o menos ya teníamos una idea previa de cómo funcionaba, pocas veces nos habíamos centrado en la problemática del alcohol. En mi opinión, esta es una de las adicciones más difíciles de afrontar. Por un lado, para la persona que sufre esta adicción, es más difícil superarla por el hecho de que está presente en prácticamente todos los ámbitos de la vida cotidiana. Es más difícil desvincularse de conductas de consumo cuando continuamente se está expuesto a ellas.

En una ocasión que trabajamos el tema de las adicciones al alcohol, nos comentaron que la persona alcohólica, lo es para toda la vida. En ese momento me costó entenderlo, de hecho no lo compartía. Sin embargo, me he dado cuenta de que es una realidad. La persona que tiene una adicción puede dejar de consumir alcohol y conseguir desarrollar una vida normalizada (a falta de una palabra mejor), pero tendrá que aprender a convivir con ese problema.

sábado, 18 de junio de 2011

13/5/2011

Hoy hemos realizado la entrevista en el Centro Amigo. Quedamos un poquito antes de la hora para llegar a tiempo por si nos perdíamos y para aclara los últimos puntos. Al final decidimos que sólo una de nosotras (Rocío), hiciese las preguntas durante la entrevista para no liarnos e interrumpir a la directora del centro, que era quien nos iba a recibir.

Una vez que estuvimos allí nos hicieron pasar al despacho de la trabajadora social y ella nos explico todo lo que queríamos saber. De hecho, el guión que teníamos preparado lo fue desarrollando casi sin que le tuviésemos que preguntar nosotras. Además, ella había cursado la Conjunta y había trabajado también de educadora social en el centro, por lo que nos pudo contar con más detalle cómo se realizaba la intervención educativa en el centro.




Una vez finalizada la entrevista, nos enseñó prácticamente todo el centro. Disponía de salas para talleres, comedor, un patio bastante amplio y tranquilo, cocina, gimnasio y varias habitaciones.

La verdad es que fue una visita bastante agradable y salimos con una impresión muy positiva, tanto de la trabajadora social como del centro. Partíamos de la dificultad que nos supuso encontrar un centro donde trabajasen la intervención educativa con las personas sin hogar. Sin embargo nos llevamos toda una sorpresa cuando vimos las posibilidades de la intervención integral con estas personas.

27/4/2011. Infancia y enfermedad

La exposición de hoy ha estado dedicada a la infancia y la enfermedad. En esta exposición hemos tratado sobre las situaciones en las que un menor se ve afectado por una enfermedad y debe permanecer un tiempo hospitalizado.

Para explicar esta situación hay que partir de la definición de la salud, más allá de la ausencia de enfermedad, se entiende como aquel estado de bienestar físico, psíquico y social. Cuando o uno a varios factores que favorecen la salud se alteran puede derivar en la aparición de la enfermedad.

En el caso de la infancia, es la etapa comprendida entre el nacimiento y la pubertad, pero también implica una época en la que los niños tienen que contar con un espacio seguro, separado de la edad adulta, en la que puedan crecer, jugar y desarrollarse. A pesar de que no existe una definición universal sobre la infancia y sus necesidades, pero de forma general encontramos una serie de derechos que pretenden proteger a un colectivo tan vulnerable como la infancia. Como referencia más cercana encontramos los Derechos del Niño en los que se reconoce tanto la protección del menor como el desarrollo del mismo.

De esta forma podemos distinguir una serie de necesidades físicas como la alimentación, la vivienda, vestido e higiene, atención sanitaria, sueño y descanso, ejercicio físico, protección de riesgos físicos. También encontramos una serie de necesidades mentales como la estimulación, la necesidad de explorar el mundo que le rodea, la escolarización, y la protección de riesgos imaginarios. Por último aunque no menos importantes encontramos las necesidades emocionales y sociales entre las que encontramos las de gestionar las emociones como comprenderlas, expresarlas o controlarlas; necesidades de seguridad emocional como la aceptación, el cuidado, el cariño que generan el apego; las necesidades de relaciones sociales, las necesidades sexuales por último, las necesidades de participación y autonomía progresiva.

En el caso de que un niño se va afectado por una enfermedad, hay que seguir teniendo en cuenta estas necesidades y desarrollar estrategias para que a pesar de su hospitalización, puedan desarrollar una infancia en la que sigan siendo estimulados, puedan jugar y relacionarse con otros niños y también entre en contacto con otros adultos. A pesar de que no pueda asistir a la escuela es importante también, seguir atendiendo su desarrollo educativo.

Dado que la enfermedad altera el bienestar de cualquier persona, en el caso de un niño, sus consecuencias también son muy importantes, tanto en él mismo, como es su sistema familiar. Se produce un impacto psicológico fuerte por el estrés que conlleva afrontar la situación y los cambios que se producen en su vida cotidiana. Este impacto también se refleja el ámbito físico como alteraciones del sueño o trastornos alimenticios; laboral, principalmente en los padres, que deben solicitar bajas; y social, ya que se produce una ruptura en las relaciones sociales.

Teniendo en cuenta estas consecuencias y las circunstancias que rodean al niño, es necesario plantear otro tipo de intervención que incluya una línea lúdica (ocio), una línea educativa (aulas hospitalarias) y una línea informativa (información sobre la enfermedad).

Para desarrollar estos aspectos dentro del ámbito hospitalario se desarrollan dos iniciativas: las Aulas Hospitalarias que atenderías las necesidades educativas de los niños y el Ciberaula, que responde a la necesidad de ocio.

El Aula Hospitalaria pretende paliar los efectos negativos que la situación de hospitalización pueda ocasionar en el proceso de maduración, desarrollo y aprendizaje de los niños. Por ello la atención educativa de éstos de desarrollarse de un modo integral, favoreciendo y estimulando el desarrollo físico, psíquico y social así como compensar el retraso escolar que pudiese ocasionarle la hospitalización. Surge así la Pedagogía Hospitalaria que pretende enseñar contenidos, no sólo escolares en el contexto sanitario especializado. Esta labor es llevada a cabo por profesores, que deben desarrollar unas funciones específicas como comunicarse con el centro del menor, realizar adaptaciones curriculares u ofrecer apoyo e información a los padres.

Por otro lado encontramos el Ciberaula, una iniciativa que plantea ofrecer espacios y momentos de ocio donde encontrarse con otras personas, recursos educativos y nuevas tecnologías dentro del ámbito hospitalario. Este recurso se está disponible todos los días del año y se plantea en torno a diferentes espacios.

  • Espacio de familia donde éstas pueden compartir tiempo, descanso y experiencias con otras familias y participar en las actividades
  • Espacio infantil, donde se encuentran recursos y mobiliario para los más pequeños que les permitan seguir desarrollándose como niños, que puedan jugar y relacionarse con otros niños.
  • Espacio de informática donde se encuentran diversos recursos como ordenadores, impresoras y escáneres y con conexión a internet.
  • Espacio de lectura y audiovisuales, en el que se encuentran recursos como libros, periódicos, revistas, equipos de música y audiovisuales.

En cuanto al papel del educador social, volvemos a encontrarnos con una escasa presencia de este perfil profesional. Sin embargo, creemos que es importante desarrollar una intervención educativa con este colectivo y entre los docentes, los médicos y los trabajadores sociales y los enfermeros hay un hueco para el educador social, con unas funciones propias como:

  • Actividades para fomentar la interacción entre niños.
  • Reintegración en el entorno escolar de origen, por su desvinculación durante la hospitalización.
  • Estudio individual de cada menor, en la medida que la única característica que comparten es la existencia de una enfermedad.
  • Coordinar la intervención con familia con el resto de profesionales.
  • Coordinar el aula hospitalaria con la escuela de origen.

En general, el tema de la enfermedad y la infancia es un tema que me ha interesado bastante, ya que conocía un poco la situación, pero no las estrategias concretas que se llevan a cabo en relación a este colectivo.

A pesar de que a medida que va avanzando el curso nos vamos dando cuenta de que, no en todos los ámbitos que creemos necesario, el educador social está reconocido me extrañó un poco que en el caso de este colectivo ni siquiera se plantee su necesidad. En este caso, vemos como se desarrollan muchas estrategias relacionadas con la educación y se interviene tanto con los niños como con sus familias no existiese la figura del educador social. Aun así, creo que es importante incluirla, ya que puede ejercer de mediador entre el menor, la familia, la escuela y su reintegración social futura.

13/4/2011. Diversidad en el mundo gitano

La exposición de hoy ha estado dedicada al colectivo gitano. Para comenzar el tema, nos han planteado el recorrido histórico del pueblo gitano. Se trata de un grupo étnico de origen indio que llegó a la Península en 1447, teniendo una buena acogida y una buena adaptación social. Sin embargo, esta situación duró poco, ya que con los Reyes Católicos comienza un periodo de persecución y represión que criminaliza a este colectivo.

Con la llegada del S. XIX, se logra una mayor inclusión del pueblo gitano a través de la agricultura y ganadería. Sin embargo, con la revolución industrial empeora su situación y vuelven a encontrarse en una situación de exclusión y marginación social. Esta situación, se mantiene hasta la actualidad. Aunque poco a poco se están llevando a cabo iniciativas que mejoran su inclusión y su participación social, aún existe grandes diferencias que hay que salvar para poder decir que se trata de un colectivo integrado socialmente.

Para poder entender mejor la situación de la que debe partir cualquier tipo de intervención con este colectivo hay que hacer referencia a la cultura gitana. En primer lugar, la familia es un pilar fundamental y generalmente, suele ser extensa, ya que pueden convivir varias generaciones. A pesar de que en la actualidad se estén introduciendo cambios, la organización suele basarse en dos criterios, el sexo, ya que suele ser patriarcal y la edad, ya que el respeto a los mayores es un valor muy importante en esta cultura.

Como hemos dicho, la familia suele organizarse en torno al papel del varón. Está organización excede en muchas ocasiones del grupo familiar, ya que suele haber un sentimiento de hermandad muy fuertes aunque no existan lazos familiares “formales”. De ahí que existan una serie de roles sociales asociados al hombre gitano, designados a través de conceptos como vara (hombre capacitado para responsabilizarse de su familia), bató (padre casado por el rito gitano y responsable de su familia), Tío (persona mayor al que se le debe respeto) y patriarca (mediador y representante con poder sobre un grupo). Estas palabras, designan roles masculinos que se podían encontrar en este colectivo, sin embargo, no tienen por qué darse en todos los grupos ni ser reconocidos como tales.

En cuanto a la mujer gitana, su papel tradicional estaba vinculado al ámbito doméstico como la crianza de los hijos y el cuidado del hogar, aunque también puede colaborar en el sustento económico de la familia. En el caso de las mujeres, encontramos también una figura de referencia social, la Tía que sería aquella persona mayor que sirve de referente a los demás por haber desarrollado un papel importante en los roles asignados a ella. En general, el papel de la mujer gitana en la participación social, suele ser aún más desigual que el de los hombres, ya que dentro de la comunidad gitana tiene un papel más importante en el ámbito privado, pero fuera de ésta se encuentran con una doble dificultad, además de ser mujeres, son gitanas, por lo que su acceso al mercado laboral por ejemplo, es aún mas difícil.

Otra característica importante de la cultura gitana la encontramos en el ámbito de las relaciones interpersonales. Generalmente, encontramos una red bastante sólida y extensa de apoyos sociales que constituyen el principal elemento de integración social de este colectivo. Generalmente, el hecho de identificarse como gitano, genera una identidad colectiva y de pertenencia al grupo.

En todo momento, tenemos que tener en cuenta que el colectivo gitano, es un grupo muy heterogéneo, ya que lo único que tienen en común, es pertenecer a la etnia gitana, por lo que la forma en la que cada uno vive e interpreta esa característica es tan variable como personas puedan encontrarse en esa situación. De forma general, y siguiendo la clasificación de Fresno podemos distinguir entre varios grupos de gitanos:

  • Grupo elitista dentro de la minoría: estaría compuesto por aquellas personas, generalmente jóvenes que tienen estudios secundarios o universitarios. Forman un grupo que apuesta por una mayor apertura del colectivo y una mayor integración social.
  • Grupo que vive “como gitano” con cierta estabilidad, poseen un trabajo estable que les permite una cierta participación social
  • Grupo en fuerte proceso de mutación: es el grupo más mayoritario, desarrollan trabajos más precarios y suelen vivir en barrios marginales.
  • Grupo desestructurado y marginal: es el grupo que se encuentra en una situación de exclusión social superlativa, con condiciones de vida y vivienda en muchas ocasiones infrahumanas y aislados de la sociedad físicamente.

A pesar de que como vemos, la pluralidad está presente en este colectivo, existe una dinámica generalizada que les conduce a una situación de exclusión muy fuerte. Esta dinámica social está interrelacionada y forma el círculo de la pobreza en el que podemos encontrar factores como:

Para analizar de forma más concreta estas problemáticas es importante tener en cuenta:

Prejuicios y estereotipos

La visión y aceptación social de este colectivo es bastante negativa. Normalmente nos encontramos con que la sociedad generaliza las conductas disociales de algunas personas al conjunto del colectivo. De esta forma vemos como se construye una percepción social que estigmatiza a todo el colectivo. Ante esta situación, el colectivo gitano debe luchar constantemente contra estos prejuicios, encontrándose en una situación de desigualdad en prácticamente todos los ámbitos de participación social.

Mercado laboral

El mercado laboral constituye un sistema importante de socialización en la etapa adulta así como un instrumento de integración social. Sin embargo, como ya hemos dicho, existen muchas dificultades para su inserción laboral efectiva.

En el caso del colectivo gitano, encontramos que tradicionalmente, se han dedicado a profesiones como la venta ambulante o el comercio, la recogida de residuos o chatarra entre otras. Sin embargo también encontramos como se están incluyendo en nuevo perfiles laborales, tanto cualificados (funcionarios) como no cualificados (construcción).

A pesar de ello, tenemos que tener en cuenta para su inclusión total en el mercado laboral aspectos como su incorporación más temprana al trabajo y un mayor tiempo de desarrollo en el mismo; existe un porcentaje de paro considerablemente más alto que entre la población en general y la precariedad laboral y los contratos temporales también les afectan más.

Hay que hacer una mención especial a la dificultad de la mujer gitana para acceder al mercado laboral, sin embargo, cada vez más mujeres están intentando desarrollarse laboralmente, tanto por la necesidad de aportar ingresos económicos a la unidad familiar como por su propio desarrollo personal.

La educación

La educación es un derecho para todos los niños y la mejor forma de adquirir y desarrollar destrezas y capacidades para relacionarnos con el mundo que nos rodea. La escuela es la institución, junto con la familia, que más influye en la socialización de una persona. Aunque existe un porcentaje importante de absentismo escolar entre los menores gitanos, cada vez existen más niños escolarizados y cada vez se presta más atención a estas situaciones.

La escuela puede configurarse como un factor de protección muy importante, ya que permite a cualquier persona su desarrollo y promoción social y un marco donde se establecen las relaciones entre iguales. En mi opinión, en muchas ocasiones, las pautas de interacción entre los niños, son el reflejo de la dinámica social que desarrollan los adultos, por lo que trabajando la inclusión, la diversidad y la interculturalidad en la escuela, se pueden evitar situaciones de marginación y exclusión en el futuro.

Quizás la asignatura pendiente sea la continuidad de los estudios, pero además de que ya de por sí se está ampliando el tiempo de permanencia en el sistema educativo, las estrategias de intervención social y educativa se centran en aspecto.

Para terminar este factor, también me gustaría destacar que la escuela puede convertirse en un lugar de encuentro, donde toda la comunidad escolar, profesores, alumnos y padres, interactúen, compartan y construyan una escuela más inclusiva para todos y más adecuada a las necesidades, no sólo del currículum de cada niño, sino también de su desarrollo personal y social.

El papel del educador social en relación con este colectivo debe desarrollarse en dos sentidos principales, pero integrados:

  • Por un lado, el desarrollo de estrategias que favorezcan la participación y la integración de la población gitana a través de intervenciones educativas que favorezcan su inclusión en el mercado laboral, así como la prevención de cualquier situación de riesgo y reeducación de hábitos y habilidades sociales con las personas que se encuentren en una situación de desadaptación.
  • Por otro lado, debe sensibilizar, transmitir y promocionar la cultura gitana a la población general, ejerciendo de mediador ante los posibles conflictos que puedan surgir y sensibilizar sobre su situación así como romper los prejuicios y estereotipos que existen sobre este colectivo.

En mi opinión es muy importante la intervención educativa con este colectivo, ya que permite, tanto romper con los estereotipos y prejuicios que normalmente existen sobre ellos, afianzar y mantener el proceso de inclusión en ámbitos como el sistema educativa y el mercado laboral a la vez que permite incidir y “redireccionar” aquellas situaciones que generan más exclusión social. También es importante potenciar la participación y visibilización de este colectivo más allá de las problemáticas asociadas a él.

28/4/2011

Hoy, como otro jueves más, hemos vuelto a quedar para seguir con nuestro trabajo sobre personas sin hogar.

Continuamos con el marco teórico, redactando las problemáticas fundamentales y los factores de riesgo de este colectivo. Al principio, no teníamos muy claro, que plantear en cada apartado, pero finalmente, dividimos la información que teníamos entre los factores de riesgo como aquellas situaciones o influencias que pueden llevar a una persona a acabar en la calle y en las problemáticas fundamentales, aquellas dificultades con las que se encontraban una vez que ya estaban sin hogar.

Una vez hecho esto, empezamos a buscar información y sobre todo contactos, a los que acudir para poder exponer en clase un caso práctico de intervención con este colectivo. Al principio pensamos en alguna asociación que trabajase con estas personas, pero tras mucho buscar, nos dimos cuenta de que la mayoría sólo trabajaban el ámbito asistencial. Nosotras queríamos encontrar una intervención educativa y si era posible, con la presencia de un educador social, por lo que nos desanimamos un poco. ¡Pero al final hubo suerte! Dimos con el Centro Amigo, en el que se desarrollaba una intervención integral con este colectivo.

Terminamos el día enviando varios correos a diferentes personas que trabajaban con las personas sin hogar y llamamos por teléfono al Centro Amigo para concertar una cita.

viernes, 17 de junio de 2011

6/4/2011. Salud mental

El siguiente tema que hemos trabajado en clase es el de la Salud Mental. A pesar de ser un tema muy importante por la incidencia que tiene en la población, no es uno de los más conocidos ni habíamos tratado anteriormente, por lo que me resultó muy interesante abordarlo desde la perspectiva educativa.

La creación de instituciones dedicadas a las personas con trastornos o enfermedades mentales puede considerarse como una de las primeras iniciativas de atención a los problemas sociales. Sin embargo, los manicomios, ejercían una función de control social y para ocultar otros trastornos de conducta o cualquier persona que no se ajustase a los parámetros sociales establecidos. Debido a esto, junto con la masificación de los mismos, la falta de profesionales y actividades terapéuticas hicieron que estas personas viviesen en condiciones nefastas, empeorando su situación física, psíquica y social. Ante esta situación, comienzan a plantearse medidas que reformasen la intervención médica y psiquiátrica de estas personas. No será hasta el s. XX cuando se genere un nuevo modelo de atención a este colectivo. Para ello se procede a cerrar las instituciones psiquiátricas que había hasta el momento y desarrollar una nueva red de dispositivos sanitarios y no sanitarios, así como mecanismos intersectoriales complementarios.

Hasta hace relativamente poco tiempo, se mantenía esta institución como la única en relación a este colectivo, por lo que aún se mantienen muchos estereotipos sobre estas personas. En mi opinión, la exclusión a la que muchas veces están sometidas estas personas se basa sobre todo en el desconocimiento. Las enfermedades y trastornos mentales producen inseguridad por el propio trato de separarlos de la sociedad al que hasta hace muy poco están sometidos. Sobre todo, también influye que bajo la denominación enfermedad mental, existen multitud de patologías o trastornos muy variados y que no afectan de igual forma a las personas que los viven y a los que les rodean.

De forma general, se puede decir que la enfermedad mental altera los procesos cognitivos y de desarrollo de una persona lo que puede influir en su razonamiento, comportamiento y forma de reconocer la realidad y adaptarse a ella. Afectan al 25 % de la población y no tiene cura, la intervención se centra en la mejora a través del tratamiento sanitario y social. Por ello, es muy importante relacionar el concepto con el de salud mental, ya que éste último incorpora dos aspectos básicos: el bienestar y la subjetividad del mismo.

El origen de la enfermedad mental puede asociarse a múltiples factores como pueden ser características genéticas, carácter individual, influencias sociales, ambientales y económicas, relacionados con la familia, entre los más importantes. Sin embargo su incidencia o perfil en la población es universal, por lo que un conjunto de factores como la predisposición genética junto con unas actitudes y conductas de riesgo pueden desembocar en una enfermedad o trastorno mental. Sin embargo, son tantas las tipologías de enfermedades mentales que es muy difícil establecer una causa que las genere.

La atención y la intervención con este colectivo en la actualidad se desarrollan en torno al ámbito sanitario, desde los Servicios Sanitarios Generales, los Equipos Básicos de Atención Primaria hasta los Equipos de Salud Mental de los Distritos de Atención Primaria. De forma paralela se desarrollan una serie de Unidades Específicas de Salud Mental en las que encontramos las Unidades de Salud mental Comunitaria, las Unidades de Rehabilitación de Salud Mental, las Unidades de Salud Mental Infanto-juvenil y las Unidades de Hospitalización de Salud Mental. Por último encontramos recursos de carácter experimental como las Comunidades Terapéuticas de Salud Mental, los hospitales de Día y la Unidad de Docencia y Psicoterapia.

A pesar de que estos recursos también se complementan con otros de apoyo social como FAISEM (Fundación Andaluza para la Integración Social del Enfermo Mental), En primera persona (Federación Andaluza de Asociaciones de Usuarios/as de Salud Mental) o ASAENES (Asociación de allegados de enfermos esquizofrénicos), todavía existen aspectos no muy abordados en la intervención con este colectivo.

Este es el caso del papel del educador social, que no está muy presente ni se contempla dentro de los recursos del territorio andaluz. La intervención con estas personas se suele abordar desde una perspectiva médica y psicológica, pero la perspectiva educativa no está integrada. Dado que la enfermedad y el trastorno mental no tienen cura, sino que hay que trabajar sobre la mejora de las condiciones de vida, la intervención educativa permite mejorar su bienestar integral.

En este sentido, la tarea del educador social debería ir dirigida al desarrollo en distintos ámbitos, la restauración y potenciación de las habilidades sociales y la promoción de la autonomía y la integración social.

Tras abordar este colectivo, sus problemáticas y factores de riesgo creo que es necesario incluir el perfil del educador social en este ámbito. Es importante que la persona, junto con un tratamiento médico y psicológico, desarrolle una intervención educativa que le permita mejorar su situación, desarrollar habilidades sociales que faciliten su inclusión social, la formación e integración laboral que mejore su autonomía y en general, estrategias que permitan afrontar una enfermedad que genera dificultades es su vida, pero con la que pueden convivir.

Para terminar la exposición con una perspectiva positiva y poniendo en relieve la presencia de personas celebres con tratarnos mentales. Entre otros destacaron personajes como Van Gogh, gran pintor que sufrió fuertes depresiones y la pobreza, entrando y saliendo de instituciones para enfermos mentales o el caso de John Nash, que desarrolló esquizofrenia y sin embargo, llegó a ser premio Nobel de Economía. Para terminar esta entrada y en relación a estos dos últimos personajes os recomiendo dos películas que abordan su vida “El loco del pelo rojo” y “Una mente maravillosa”

30/3/2011 "Tal como somos". Síndrome de Down

La siguiente exposición que hemos tenido en clase ha sido sobre el colectivo de personas con Síndrome Down. Este trastorno se produce por la alteración en el cromosoma 21 lo que produce una serie de diferencias en el desarrollo de estas personas.

Desde una perspectiva histórica, la situación de estas personas era de abierto rechazo social. Hasta el siglo XIX no se desarrollan las primeras atenciones a este colectivo. Sin embargo en el s. XIX John Langdon Haydon Down identifica y da nombre al trastorno, aunque será Jérôme Lejeune quien determine el origen cromosómico del mismo. En la actualidad, la OMS lo considera una discapacidad psíquica y no una enfermedad. Sin embargo, el hecho de tener Síndrome de Down, lleva asociadas algunas patologías como problemas cardiovasculares, alteraciones gastrointestinales, trastornos endocrinos, de la visión, audición u odontoestomatológicos. Esto hace que su problemática sea más compleja, ya que a sus necesidades educativas se le suman algunos problemas físicos.

En primer lugar, hay que destacar que se trata de un colectivo que comparte una serie de características físicas y psíquicas comunes aunque no es un colectivo totalmente homogéneo ya que, sobre todo las características psicosociales pueden cambiar considerablemente de una persona a otra. A pesar de que dos personas puedan tener Síndrome de Down, sus necesidades y desarrollo no tienen por qué ser las mismas.

Sin embargo, podemos destacar como características psicosociales generales de este colectivo:

- Tendencia a la persistencia de las conductas y resistencia al cambio.

- Dificultad para entender varias instrucciones secuenciales.

- Suelen entender literalmente lo que les dicen.

- Suelen mostrarse dependientes de los adultos.

- No suelen presentar problemas destacables de conducta.

- En algunas ocasiones se dan situaciones de aislamiento bajo una hipotética integración.

Como ya hemos dicho, se trata de características generales, que deben tenerse en cuenta a la hora de conocer a este colectivo. En mi opinión, es importante partir de estos aspectos, ya que nos ayuda a comprender más que las necesidades que puedan tener cada persona, la forma de responder a ellas. Es decir, con el desarrollo individual y social de cada una de éstas personas se podrán identificar unas necesidades y unas potencialidades propias, pero las características psicosociales plantean las líneas generales con las que abordar la interacción y/o intervención con ellas

Los factores de riesgo que podemos encontrar en este colectivo se encuentran relacionados con todos los sistemas sociales en los que pueden participan. Es decir, los factores de riesgo de las personas con Síndrome de Down están muy relacionados unos con otros e impiden su inclusión social real. Intentando plantearlos de forma secuencial, aunque se den realmente de forma simultánea podemos abordar los diferentes ámbitos de socialización y su relación con el Síndrome de Down. Empezando por el ámbito relacional, encontramos que pueden darse situaciones de escasez y debilidad en las redes sociales, por lo que su primer ámbito de socialización se ve afectado. En el ámbito educativo y formativo, con el que se incrementan los espacios de socialización, se dan situaciones de abandono prematuro, bajo nivel de formación y falta de cualificación. Esto hace que por lo tanto, sea mucho más difícil que puedan acceder a al mercado laboral y a su vez, la falta de recursos económicos que le permitan desarrollar cierta autonomía y no dependan de las prestaciones. De esta forma, se mantiene el riego en el ámbito residencial, ya que no pueden acceder a una vivienda, lo que tampoco favorecer su inclusión e igualdad. Así nos encontramos en una situación en la que no existe una participación ciudadana de éste colectivo, marcada por la influencia de un contexto sociosanitario marcado por la existencia de una sociedad discapacitante que no favorece la inclusión y la autonomía de estas personas.

Acercándonos de forma más concreta al ámbito educativo, es importante destacar, que con la aparición de la educación especial en los años 70´s, empezó a plantearse la necesidad de abordar esta problemática desde un prisma educativo que permita el desarrollo de estas personas y puedan acceder al máximo grado de autonomía y bienestar que puedan alcanzar.

Desde esta perspectiva encontramos una serie de problemáticas que hay que tener en cuenta para abordar la intervención educativa. A continuación, intentare plantear, en función de algunas diferencias en el aprendizaje, la mejor forma de responder educativamente.

- Ritmo lento de aprendizaje: ofrecer contextos y experiencias variadas que refuercen el proceso de adquisición de destrezas y habilidades.

- Poca atención: desarrollar actividades en periodos cortos, especialmente a través de objetos llamativos y que generen motivación.

- Escasa curiosidad: relacionado con lo anterior, es necesario captar su atención y despertar su interés.

- Dificultad de empezar y acabar la tarea: es importante motivar a la persona para que inicie la actividad, guiando durante su desarrollo y manteniendo su interés durante el mismo.

- Dificultad de recordar: es necesario hacer repeticiones y secuenciar las actividades

- Baja capacidad imaginativa: la mejor forma de abordarla es a través del fomento de la iniciativa personal

- Potenciar el resultado positivo inmediato: como ya hemos dicho, es difícil mantener su interés y motivación en la realización de tareas, por lo que es muy positivo para ellos que les sean reconocidos sus esfuerzos

- Participación activa: es importante que las personas se sientan protagonistas de su vida y su aprendizaje. Esto requiere atención, motivación y reconocimiento con el fin de que puedan desarrollar su autonomía.

De forma general, podemos decir que la intervención educativa con las personas con Síndrome de Down tiene que partir de la respuesta y la estimulación acorde a su etapa de desarrollo, sus capacidades y potencialidades con el fin de adquirir el mayor grado de autonomía posible. Para ello, hay que incidir en todos los ámbitos relacionales (familia, escuela, mercado laboral, etc.).

Como caso práctico de intervención con este colectivo, los compañeros destacaron la labor de ASEDOWN. En ella, se desarrollan una serie de programas y servicios que se pueden diferenciar entre intervención educativa en función de la etapa (infantil, escolar y adult

a), apoyo y atención a las familias y voluntariado, ocio y tiempo libre. De

forma más concreta podemos encontrar:

- Etapa infantil: la intervención se centra en la atención temprana, la estimulación motora y del lenguaje y el asesoramiento a los centros educativos

- Etapa escolar: con el acceso a la escuela, la intervención se centra en el apoyo escolar, el desarrollo del lenguaje y las habilidades sociales.

- Etapa adulta: en este momento se pretende consolidar la formación y la autonomía a través de Programas de Garantía Social, Formación y Orientación Laboral, el empleo con apoyo y el asesoramiento a las empresas. Para potenciar la autonomía también se trabaja la transición a la vida adulta, la movilidad urbana y las destrezas y habilidades para el desarrollo de la vida cotidiana.

- Atención a las familias: en este caso, la intervención se centra en el entorno más cercano del niño, su familia, por lo que se ofrece además de la acogida, el asesoramiento psicológico y la escuela de padres y hermanos con el fin de que la familia pueda desarrollar sus funciones sociales y educativas atendiendo a las especificidades de estas personas.

- Voluntariado, ocio y tiempo libre: en este ámbito se pretende, tanto sensibilizar a la población, como el desarrollo de actividades de ocio y tiempo libre con las personas con Síndrome de Down. Como hemos dicho, es importante la estimulación de este colectivo, pero también hay que ofrecer actividades lúdicas y de ocio que ofrezcan otros contextos de experiencias para ellos.

Para terminar esta entrada me gustaría destacar que la presencia del educador social, suele estar presente en la intervención con este colectivo, realizando funciones de atención y asesoramiento a la familia, seguimiento individualizado, desarrollo de proyectos y programas educativos y talleres de ocio y tiempo libre, sensibilización, coordinación y mediación con la escuela y las empresas. De esta forma vemos que las funciones y el papel del educador social están bien definidas en la intervención con este colectivo.

En mi opinión, a pesar de que es necesario intervenir ante esta problemática ya que a través de la perspectiva educativa se puede conseguir un mejor desarrollo y autonomía, se trata de un colectivo que tiene una red de apoyo y recursos bastante desarrollada. En la sociedad actual, en general existe una buena aceptación del colectivo aunque se pueden dar situaciones de exclusión social, lo que realmente frena su inclusión real es la falta de participación y autonomía de este colectivo. Es decir, se desarrollan estrategias educativas para el desarrollo motor, del lenguaje, de las habilidades sociales y la autonomía desde la infancia y a la adultez, pero es en el momento de su participación más autónoma en la sociedad donde se frena su inclusión.

sábado, 4 de junio de 2011

14/4/2011

El último día que quedamos establecimos como día de quedar para seguir con nuestro trabajo de Intervención. Volvimos a quedar en la UPO y seguimos buscando información relacionada con la temática que nosotras estábamos trabajando. En primer lugar, tratamos de definir el concepto y luego intentamos configurar el marco legislativo de referencia.

La verdad que este trabajo fue un poco pesado, tanto por la búsqueda en sí de legislación que afectase al colectivo porque prácticamente no encontramos nada concreto que hiciese referencia a las personas sin hogar; como por la lectura en sí de la normativa, ya que al no estar directamente relacionada, era difícil de identificar los aspectos que nosotras trabajábamos.

Después de dedicar toda la mañana a buscar, recopilar y seleccionar definiciones y legislación sobre personas sin hogar hicimos una parada para comer. Tras esto y cansadas del trabajo de análisis y síntesis de la mañana, nos dedicamos a mandar correos electrónicos para contactar con diversos profesionales que trabajaban con las personas sin hogar y nos contasen su experiencia para utilizarlo en la aplicación práctica. Con esto, se termina nuestra jornada de trabajo.

7/4/2011

Hoy hemos quedado por primera vez para empezar nuestro trabajo sobre el colectivo de las personas sin hogar. A pesar de que ya teníamos un guión más o menos establecido para seguir el trabajo, empezamos con una búsqueda intensiva de información por internet para poder saber de forma aproximada cual era el colectivo al que íbamos a conocer, que información era más importante y que tipo de información podíamos obtener sobre el tema.
Una vez que creímos tener material suficiente para ponernos a trabajar, empezamos a poner en común la información que habíamos encontrado cada una, seleccionando lo que nos podía servir y lo que no.
Tras algunas polémicas sobre lo que cada una consideraba importante en el trabajamos, empezamos a plantear nuestro marco teórico.

lunes, 30 de mayo de 2011

23/3/2011 ¿Y si hoy no pudieras comunicar lo que sientes?

El siguiente tema que hemos tratado en clase ha sido sobre el Autismo. En primer lugar, por autismo se entiende como un trastorno neuropsiquiátrico del desarrollo que se manifiesta durante la infancia. Se caracteriza por la no aparición (o su aparición diferencial) de algunos aspectos básicos del desarrollo como las competencias para relacionares, comunicarse o cómo comportarse con los demás. Debido a la diversidad clínica y social de las personas con autismo, se utiliza el término Trastorno del Espectro Autista (TEA) de forma más genérica, incluyendo el Trastorno Autista de Kanner, el Síndrome de Asperger, el Trastorno Generalizado del Desarrollo No Especificado, el Trastorno Desintegrativo Infantil y el Sindrome Rett.

En general, se trata de un colectivo, que aunque heterogéneo, destaca por una serie de alteraciones importantes y que constituyen factores de riesgo. Podemos destacar:

-Alteraciones en la interacción social: presentan dificultades para ajustar su comportamiento al de los demás, no suelen entender muy bien las normas sociales. También suelen tener problemas para compartir el mundo emocional, los pensamientos e intereses. Esto genera aislamiento social, sobre todo en la etapa infantil, pudiendo atenuarse con el desarrollo y la adquisición de nuevas competencias

- Alteraciones en la comunicación: un porcentaje importante de las personas con autismo no llegan a desarrollar el lenguaje y en los casos en los que sí se desarrolla, frecuentemente se encuentran características como la ecolalia, perseveración, inversión pronominal, etc. Además, esto se acompaña de la pobreza o ausencia de comunicación no verbal.

- Patrones restringidos de comportamiento, intereses y actividades: las personas con autismo presentan intereses especiales que no suelen compartir con los demás. También pueden padecer movimientos corporales estereotipados. En la infancia, el juego tiende a ser repetitivo y de forma, a lo largo de su vida, pueden sufrir ansiedad ante los cambios en las rutinas.

De esta forma podemos destacar que el origen de la vulnerabilidad de este colectivo es doble, ya que por un lado existen ciertas enfermedades que afectan al cerebro que se presentan con mayor frecuencia en este colectivo. Por otro lado, el tener que adaptarse a un entorno que no comprenden o no está adaptado a sus necesidades puede generar otros problemas como ansiedad, conductas violentas, obsesiones, trastornos del sueño, etc.

Desde el análisis de la evolución del autismo por etapas podemos distinguir:




Una vez expuestas las características del colectivo es importante atender a cómo se da respuesta a las necesidades de las personas con autismo. En primer lugar, me gustaría destacar que existe un consenso internacional sobre que la educación y el apoyo social son los principales medios de intervención ante el autismo.

Para poder abordar perspectiva educativa con este colectivo hay que tener en cuenta la necesidad de que la intervención sea temprana e intensiva, generando situaciones que permitan el aprendizaje continuo. También destaca la necesidad de que el aprendizaje esté muy estructurado.

En cualquier caso, es importante determinar un plan individualizado acorde a los intereses del niño (o fomentándolo inicialmente). Algunas de las estrategias a utilizar a menudo con un calendario predecible, enseñando tareas fraccionadas en pasos sencillos, implicando activamente al niño en actividades altamente estructuradas y reforzando de maneras variadas su comportamiento.
Un recurso muy utilizado en la intervención con este colectivo son los pictogramas. Su utilización se aplica tanto para mejorar la comunicación de estas personas como para proporcionar una estructuración del tiempo con el fin de reducir la ansiedad, aumentar la tranquilidad y la motivación de los niños.

La participación de los padres se ha identificado como un factor fundamental para el éxito y la familia debe coordinarse con el profesorado y otros profesionales de apoyo a la hora de determinar objetivos y sistemas de apoyo. Esto contribuye a mejorar su autonomía sobre todo en la adolescencia y la adultez, a través de la adquisición de hábitos de higiene y aseo personal, alimenticios, etc.

Tras esta exposición, ha mejorado considerablemente la visión que tenia de este colectivo, ya que conocía el trastorno en sí, pero no de forma concreta cada una de las alteraciones que conlleva. En mi opinión, el hecho de que la problemática de este colectivo afecte concretamente al plano relacional y la comunicación de una forma tan directa agrava su situación. Sin embargo, a pesar de ello, también es importante tener en cuenta el papel de la educación para mejorar la vida de estas personas.